Tal día como hoy, 15 de Febrero, en 1941, el rey de España Alfonso XIII abdicó sus derechos al trono y los cedió a su hijo Juan de Borbón. Para situarnos a lo largo de esta historia, estamos hablando precisamente del abuelo y del padre de nuestro actual rey, Juan Carlos I de Borbón.
La historia es controvertida, tanto la de Alfonso como la de Juan, pues el primero pecó de ser un rey que permitió que España viviera bajo dos dictaduras, la de Primo de Rivera, desde 1923 y tras ella la del General Berenguer, y el segundo, nunca pudo ser rey, fue algo que Franco se propuso en su momento y que lo consiguió. 
Pues bien, comenzando a hablar del rey Alfonso XIII (el abuelo de nuestro rey), llegó al trono tras heredar el puesto de su padre Alfonso XII. Él era pequeño cuando su padre murió, por lo que primero vivimos la regencia de su madre Mª Cristina de Habsburgo (no debemos equivocarla con Mª Cristina de Borbón, también regente pero en el periodo de Isabel II) y tras ello llegó su gobierno. Alfonso XIII no se caracterizó por su gobierno precisamente, sino más bien, por el famoso desastre del 98, en el que perdimos las colonias de Cuba, Puerto Rico y Filipinas, y nos metimos en una Guerra con EE.UU. Tras una guerra y un desastre de colonias, además, vivimos diferentes escándalos con este rey, y también él mismo sufrirá intento de atentado por parte de anarquistas. En medio de esta política, hubo que sumar que el General Primo de Rivera dio un Golpe de Estado en 1923 con su consentimiento, conociendo una primera dictadura España. Tras ello, llegará una segunda dictadura, la del general Berenguer, conocida como la Dictablanda, por el caracter diferente de la anterior dictadura.
Viviendo tantos problemas, no era de extrañar que ya se olieran voces de personas que pedían una República, pues la Primera aún seguía caldente entre los españoles, y el bipartidismo político durante Alfonso XII no dejó que las voces republicanas se oyeran. Así, en 1931 se convocaron elecciones en España y se proclamó la Segunda República Española, viéndose Alfonso XIII obligado a abandonar España antes de que se produjera la Guerra Civil Española.
Vivimos una Segunda República de 1931 a 1939, y entre el gobierno de la Segunda República, sucedió uno de los capítulos más tristes de la historia española, la Guerra Civil española, durante 1936 y 1939, en la que se enfrentaron Republicanos y Sublevados (con Franco al frente), siendo éste último bando el que ganó, e introdujo a España en una Dictadura por el General Franco hasta su muerte en 1975.
Pero el problema vino para Franco con Alfonso XIII, ambos muy amigos, y de quien esperaba el rey que había abandonado el país, que Franco le hiciera trato de favor para poder gobernar. Ésto nunca sucedería, pues Franco dejó bien claro, que Alfonso XIII no estaría en el poder debido a los fallos que tuvo anteriormente en su política.
Alfonso XIII tuvo un primer hijo, Alfonso, quien sufría de Hemofilia y rechazó su derecho al trono por casarse con una mujer que no pertenecía a la realeza, y tras él, un segundo hijo, Jaime, sordo de nacimiento, que también tuvo que rechazar su derecho al trono (que después se arrpentiría, y ha llevado a muchas más historias que algún día contaré). Además dos infantas, pero ya con una ley Sálica, el derecho al trono recayó en Juan de Borbón, el padre de 
nuestro rey. Así, en 1941 llegaría la abdicación en el trono de Alfonso XIII en su hijo Don Juan. Éste nunca llegaría a ser rey, pues las pretensiones de Franco hicieron que así fuera, ya que tuvo que marcharse en el exilio a vivir a Portugal, y por más intentos de negociación que hizo con el dictador, no había manera de que el trono recayera en él. 
La única opción que le quedó a Don Juan fue la que quiso Franco: dejar a Juan Carlos que se educara en España con el dictador, para ser el heredero al trono a la muerte de Franco. Y así fue, a en 1975 con la muerte de Franco, Juan Carlos I fue proclamado rey, y dos años más tarde, en 1977 Don Juan de Borbón se vería obligado a renunciar a sus derechos dinásticos, quedando siempre con el título de Conde de Barcelona y nunca sería reconocido como Juan III (el que le tocaba si hubiera sido rey).
El día de hoy ya muchos lo conocéis, actualmente tenemos al Jefe de Estado, Juan Carlos I, rey de España, y como bien os digo en clase, la historia se escribe cada día, por lo que este capítulo de lecciones de historia no se ha acabado, se escribirá más adelante y ojalá os siga contando por aquí lo que suceda.
Imágenes extraídas de Wikipedia.
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